14, enero 2025

Productividad y crecimiento: El desafío de Chile en la nueva economía global

El progreso de un país está influido por numerosos factores, los cuales varían según su nivel de desarrollo. Aspectos económicos, sociales, institucionales, naturales, geográficos y demográficos, entre otros, no solo impactan, sino que a menudo determinan su crecimiento.

La productividad es fundamental para el crecimiento económico sostenible, la reducción de la pobreza y la mejora del nivel vida. No obstante, ¿qué se entiende por productividad? En términos simples, es la eficiencia con la que un país utiliza sus recursos, ya sea capital o mano de obra, para producir bienes y servicios. Por tanto, un aumento en la productividad permite generar más valor utilizando los mismos recursos, lo que impulsa el crecimiento del PIB, salarios reales y la atracción de inversiones extranjeras.

De acuerdo con el último Informe del Fondo Monetario Internacional, sus proyecciones de crecimiento para Chile reducen la estimación del PIB de 2024 del 2,5% al 2,3% y sitúa el de 2025 entre un 2% y un 2,5%. Según el reporte, el crecimiento del próximo año estará impulsado por las exportaciones mineras y de servicios. Se espera que la recuperación de la demanda interna sea el principal motor económico.

En el plano mundial, desde la década pasada, el crecimiento de la productividad agregada de la economía ha presentado una desaceleración, que se ha observado en el decrecimiento de la productividad laboral media, entendida como la cantidad producida por unidad de trabajador (u horas de trabajo), así como en la evolución de la productividad total de factores, que se refiere a la eficiencia con la que se combinan todos los insumos necesarios para la producción.

Ahora bien, ¿por qué esta desaceleración es una señal de alerta? Esta desaceleración preocupa ya que sus efectos tienen implicancias directas en el bienestar de la población, generando también tensiones sociales, presiones fiscales e inestabilidad financiera. Por tanto, el país está en el momento de tomar acción y revertir la curva. Hay una ventana de oportunidad, ya que, desaceleraciones y shocks negativos a la economía, como los vividos hace poco tiempo, pueden actuar como un catalizador para corregir desequilibrios, estimular reformas y fomentar la innovación, sentando las bases para un crecimiento más sólido y sostenible. No es tarea fácil, pero alineando los objetivos y con las correctas políticas públicas, se puede revertir la situación.

Como mencionamos anteriormente, existe una diferencia natural en las desaceleraciones de productividad, entre países desarrollados y emergentes que provienen de una serie de factores estructurales, como lo es una matriz productiva, que, en el caso de Chile, presenta una fuerte dependencia a los commodities y una falta de inversión en I+D y a la calidad del capital humano.

Ahora bien, detrás de esto, hay buenas noticias, las instituciones juegan un rol fundamental y la literatura estima que existe un margen significativo para aumentar la productividad y converger a los niveles de los países más desarrollados. El desafío principal está en reducir estas brechas de productividad mediante políticas en educación, reasignación de recursos y adopción tecnológica. Así como también en diversificar la economía agregando valor a los commodities y desarrollando y potenciando las energías renovables en todas sus formas.

Finalmente, es importante destacar que Chile tiene amplias ventajas competitivas en energía solar, eólica e hidrógeno verde. La migración actual también presenta una oportunidad para Chile, ya que incrementa la productividad marginal del capital, impulsando inversión y expansión en sectores intensivos en mano de obra. Lo que nos propone una combinación única de oportunidades basadas en recursos naturales, innovación tecnológica y diversificación económica, que, con las adecuadas políticas públicas y recursos alineados, existe la oportunidad de crecimiento, generando nuevos empleos y produciendo energía limpia.

Catalina González – Analista de Operaciones

Fuentes:

FMI. (2024). Perspectivas de la economía mundial, octubre de 2024: cambios de política y amenazas crecientes.

Banco Central. (2024). NOTAS DE DISCUSIÓN DIVISIÓN POLÍTICA MONETARIA N°6 Desaceleración de la Productividad.